A partir de lo visto, los gráficos realizados contribuyen a los estudios de la dinámica de las distintas
bandas de frecuencia, donde se empodera la importancia de estas dos bandas de frecuencia (HFO 7 y
HFO 16) sobre el resto, en términos del análisis espectral realizado. Al integrar toda la información y
tratar de analizar que bandas contribuyen a la comunicación e información de la red de neuronas
involucradas en la epilepsia, se observa que existe una clara tendencia informativa a partir de los 250
Hz, es decir, la actividad de las espigas y los procesos eléctricos se sincronizan en el rango de estas
frecuencias, lo cual conllevará a una alta regulación de los circuitos excitatorios y una baja regulación
de los circuitos inhibitorios coordinada por estas oscilaciones. Dado esto, es de suma importancia poner
énfasis en esta banda de frecuencia debido a que existen indicios de que gran parte de la coordinación
de los mecanismos epilépticos transcurre por medio de estas frecuencias. En base a esto podría
asociarse al papel fundamental informativo de estas bandas de frecuencia, lo cual nos permiten
señalarlas como posibles biomarcadores en cuanto al inicio del período ictal de la crisis de la epilepsia.
Por otro lado, la posibilidad de cuantificar la reproducción de la crisis, contabilizando el modo y el
lugar en donde estas comienzan a manifestarse, empodera la utilización de las herramientas provistas
por la teoría de Fourier.
IV. CONCLUSIONES
A partir del análisis realizado se puede concluir que la señal basal tuvo un comportamiento del tipo
“control” respecto de la señal preictal, en donde la dinámica observada fue distinta para las HFO,
sirviendo así de referencia. De modo opuesto, las bandas Delta a Gamma 2 muestran una dinámica
idéntica en ambos registros. Dicha situación muestra la escasa información proveniente de estas
oscilaciones para poder atribuir a las mismas alguna función correspondiente a la dinámica de su
mecanismo durante la epilepsia. Siendo aún un trabajo en progreso, restan analizar con mayor detalle
las características asociadas con los períodos preictales, estudiar la espacialidad de los mismos, para ver
la propagación de los precursores de las crisis, y estudiar más crisis en un mayor número de pacientes.
No obstante, esta metodología es una buena candidata para lograr distinguir entre período basal y
preictal, y además de lograr resaltar la importancia de las HFO en el período preictal.
AGRADECIMIENTOS
Los autores agradecen la colaboración de la Unidad Ejecutora de Estudios en Neurociencias y Sistemas
Complejos (CONICET-UNAJ-Hospital “El Cruce”) en cuanto a los registros electrofisiológicos
provistos para el estudio llevado a cabo en este trabajo.
REFERENCIAS
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